Láseres para Tratamientos Estéticos
Láseres para tratamientos estéticos
Invasivos y no Invasivos
Invasivos (Ablativos), No Invasivo (no ablativos) de rejuvenecimiento, de pigmentación, vasculares
La lista es larga, existen muchos tipos y muchos nombres extraños para esta línea de tratamientos de belleza.
Los tratamientos estéticos y para el cuidado de la piel son cada vez más sofisticados, y pueden lograr efectos sorprendentes sin ser demasiado invasivos. Ya sea para tratar patologías, o sencillamente para mejorar la apariencia, esta tecnología ofrece varias opciones que entregan resultados que eran impensados hace sólo años.
La palabra “láser” es el acrónimo de Light Amplification by Stimulated Emission of Radiation (es decir, Amplificación de Luz por Emisión Estimulada de Radiación), y desde hace décadas que ha sido muy utilizado en dermatología.
Existen dos grandes grupos:
- Ablativo:
Se trata de un láser que provoca laceración y que elimina la fina capa externa de la piel (epidermis) y calienta la piel subyacente (dermis), lo que estimula el crecimiento de nuevas fibras de colágeno. A medida que la epidermis se cura y vuelve a crecer, la zona tratada se ve más lisa y firme.
- No ablativo:
Este es un láser que no provoca laceraciones y que estimula el crecimiento del colágeno, que con el tiempo ayuda a mejorar el tono y la textura de la piel.
Este enfoque puede hacerse con varios tipos de láseres, así como con dispositivos de luz pulsada intensa.
Tipos
Dentro de los láseres ablativos -es decir, que no destruyen, sino que trabajan sobre un algo específico- se encuentran los vasculares y los de pigmento.
Los primeros, como dice su nombre, van a afligir lo vascular. Hay algunos que atingen principalmente telangiectasias, los puntos rojos (angiomas rubí) o las ‘arañitas’ en las piernas. El otro láser vascular es el que trabaja en lo rojo en general, que sirve para algunas lesiones vasculares y para tratar la rosácea.
Por otra parte, encontramos los láseres que tratan el pigmento, estos trabajan “sobre el color café”, es decir, atenúan léntigos solares (pecas) o melasma.
Los tatuajes también se tratan con este tipo de láser, usando diferentes energías para borrarlos: El láser rompe el pigmento del tatuaje y al fraccionarlo lo deja en un menor tamaño, para que las células de la piel -los macrófagos- lo destruyan y consuman.
Otro tipo de láseres son los de rejuvenecimiento, que estimulan colágeno, mejoran la calidad de la piel y disminuyen el envejecimiento cutáneo.
Otro láser de rejuvenecimiento, pero ablativo, es el que se conoce como ‘fraccionado’, que puede ser de CO2 o erbio. Como dice su nombre, este láser emite la luz de una manera fraccionada: Al hacer microcanales en la piel, destruye algunas zonas y otras mantienen su estado, por lo tanto la recuperación es más rápida.
Dentro de los no ablativos aunque no sean un Laser se encuentra la IPL que es Luz Pulsada Intensa es esta combina diferentes longitudes de onda para mejorar la piel en su calidad y disminuir lo rojo, lo café, estimulan colágeno, disminuyen el tamaño de los poros y dejan la piel más luminosa.
A pesar de que no es un láser, en cuanto a tipos de tratamientos efectivos y no invasivos también vale la pena destacar el HIFU, o Ultrasonido Focalizado de Alta Intensidad, una tendencia muy popular en la estética actual.
El HIFU no es un láser, Es un ultrasonido focalizado. Es calor tan profundo que calienta la fascia, llegando a lo más profundo de los tejidos, y con ese micro daño que genera con el calor, logra un efecto lifting, ya que aumenta la producción de elastina y colágeno.
Además, transforma la grasa sólida en líquida, lo que ayuda a que el organismo la elimine de manera natural.
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