Nueva Técnica para eliminación de tatuajes y micropigmentos sin Láser

Eliminación de tatuaje con la técnica Trans Epidermal Pigment Release (TEPR)

Hasta ahora creíamos que el método más eficiente para poder acabar con los tatoos era el láser, y Sí, es una excelente opción, pero los beneficios no son tan amplios como la técnica que hoy en día se ha posicionado en buen lugar,  un dispositivo electrónico que usa múltiples agujas finas para perforar la piel.

La técnica Trans Epidermal Pigment Release (TEPR)  es un método de eliminación de tatuajes “inverso”.

Una técnica innovadora que borra el tatuaje sin dejar marcas visibles. 

Funciona de la misma forma que la pistola de tatuar convencional, con agujas que inyectan ácido láctico, un producto natural, que actúa como esponja y hace salir el pigmento hacia el exterior de la piel.

Esta técnica es un claro ejemplo de lo que puede terminar con lo que el láser no.

Consiste en inyectar una sustancia en el corazón del tatuaje para terminar con los pigmentos. 

Básicamente el proceso para eliminar el tatuaje es el mismo que cuando se realiza con láser y, su función es hacer que el resto de los pigmentos sean eliminados de forma segura del cuerpo humano.

Del mismo modo, la aparatología de aplicación de esta técnica es muy similar a la que se emplea al tatuar la piel:

Agujas que dejan una solución natural en el tatuaje (la pigmentación). Dicha sustancia realiza su labor como si se tratase de una esponja que deja todo el dibujo del tatuaje en la parte externa de este órgano, la piel.

Por lo tanto, las diferencias entre el láser y la técnica TEPR están muy marcadas …

Aunque el resultado puede ser el mismo,  la destrucción y eliminación de pigmentos de la piel que es lo que nos interesa la ejerce mejor con la técnica TEPR, que además tiene la capacidad de eliminar más colores en los tatoos: amarillo, blanco, entre otros combinados.

Este proceso en cuestiones de dolor es muy similar al de cuando se tatúa, no obstante, para pieles sensibles en ocasiones se emplea anestesia.

Las sesiones para destruir por completo los pigmentos, se requiere un número entre 3 a 5, con un intermedio que el especialista le informará, según sea el caso. 

Para poder apreciar los resultados estos se verán en un lapso de 3 semanas aproximadamente.

¿Cómo funciona?

La técnica TEPR es una versión moderna de una antigua técnica de eliminación de tatuajes, que utiliza la teoría de la cicatrización de heridas de espesor parcial en forma modificada. 

Se basa en lesiones de espesor parcial poco espaciadas en un área de superficie pequeña , con puentes de piel intermedios de epidermis y dermis intactas. 

Se utilizan agujas compactas, similares a las de los dispositivos de tatuaje tradicionales.

TEPR utiliza microagujas de grado médico, que se ajustan a profundidades de penetración precisas definidas por el usuario . 

Estos parches desepitelizados exponen la dermis subyacente, en la que se introduce el líquido. Las agujas facilitan la penetración a una profundidad definida de la dermis.

 Por lo tanto, se crea una lesión de espesor parcial en la piel (a una profundidad que debe incluir toda la dermis pigmentada del tatuaje) y se seca en el transcurso de un día. 

Luego, la cicatrización de la herida de espesor parcial procede alrededor y debajo de la piel donde se realizó el tratamiento, que se desprende de la piel después de aproximadamente dos semanas. 

El pigmento del tatuaje que se encontraba dentro de esta parte de la piel se libera así.

Una vez que las heridas del TEPR están maduras (cicatrizadas, pálidas y planas) se puede realizar una nueva sesión de tratamiento en un área adyacente de la piel pigmentada del tatuaje, utilizando la misma técnica. 

De esta forma, se puede cubrir y eliminar progresiva y secuencialmente toda la zona del tatuaje, en tres o cuatro sesiones .

La técnica TEPR se debe aplicar sobre una zona limpia y depilada, preparada con alcohol limpiador. 

No se requiere anestesia en el 80% de los casos. 

La aguja utilizada es ajustable, limita la cicatriz y son lo suficientemente profundas para llegar al pigmento del tatuaje. 

Así, en 3 o 4 sesiones se trata toda la zona del tatuaje. 

El paciente debe seguir con precisión los consejos de postratamiento dados por el médico tratante.

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